Etapa 5: SAUMUR - ANGERS
Esta etapa es corta y relajada, sin grandes visitas significativas en el camino, así que después de desayunar realizamos visita turística en Saumur pues ayer llegamos tarde y se nos quedó pendiente mucha cosa. Hoy se encarga Antonio de la furgo.

Lo primero subimos al castillo que se encuentra en lo alto de una colina, no pudimos entrar a visitarlo porque todavía no habían abierto, nos conformamos con su vista exterior y las estupendas panorámicas que se divisan desde la colina sobre la ciudad, el río, sus puentes, el valle, etc.
Después bajamos de nuevo al centro de la ciudad para contemplarla de día y visitar sus edificios más representativos.

Tras la visita turística abandonamos Saumur y la ruta nos pasea por alguna de las mas de de mil haciendas que perpetúan la riqueza de la cría de caballos de Anjou, podemos contemplar algunos ejemplares pastando tranquilamente, se respira el culto hípico por la zona.

Después la señalización nos devuelve de nuevo a la orilla del río, primero por un tramo de pista y luego otra vez por la D-751 hasta Chênehutte y después Trèves, donde nos paramos a visitar su bonita iglesia. Continuamos por la D-751 y nueva parada y visita a la iglesia en Cunault.

A partir de Cunault la Eurovelo nos lleva hacia el interior por una zona boscosa con pantano muy bonita que nos permite disfrutar de pedalear tranquilamente por un entorno precioso con un día estupendo, hoy no tenemos tormentas ni aire que nos machaque.

Después del pantano la etapa gira de nuevo hacia el río en dirección Gennes. Al llegar a la entrada de la población se produce un vacío de señalización en un cruce, el sherpa Jorge se adelanta para confirmar ruta con el gps y regresa al cruce donde esperaba el resto de cabalgantes para entrar todos juntos en Gennes.

A partir de Gennes, la etapa transcurre por una carreterita pegada al río, sin apenas tráfico, lo que nos permite saborear el recorrido, sin prisas pero sin pausas vamos dejando a nuestra izquierda las poblaciones de Besse, Le Thoureil, el Parque de la Abadía de St Maur y St. Rémy la Varenne, desde donde nos encaminamos al puente metálico que cruza el río a la altura de St. Mathurin sur Loire.

En el giro que hace la pista para pasar por debajo del puente nos encontramos con una señal de aviso a los ciclistas que llama poderosamente nuestra atención, se ve que más de uno ha seguido recto y se ha ido al agua con bicicleta y todo, esto es seguridad vial para el ciclista.
Cruzamos a la orilla norte para entrar en St. Mathurin y aprovechamos para hacer una parada de avituallamiento. Como venimos haciendo en los últimos días, compramos viandas y bebidas y damos cuenta de ellas en la plazita que hay delante de la iglesia del pueblo.

Después de St. Mathurín, continuamos la etapa durante unos km un tanto insulsos por campos de cultivo, granjas y aldeas hasta llegar a La Daguenière, desde donde la etapa se acerca de nuevo a la orilla del río durante unos km hasta llegar a las inmediaciones de Les Pint de Cé, aquí giramos hacia el norte, cruzamos el canal y atravesamos Saint Aubin.

A partir de aquí nos esperan unos 6 km de zona urbana pestosa hasta llegar a nuestro hotel en el centro de Angers. En tramos suburbanos como éste se aprecian las ventajas del gps y el curro previo de nuestro sherpa Pedro configurando y cargando en los track’s la dirección de los hoteles, un 10 para Pedro.
Al llegar al hotel nos encontramos con Antonio que ya lo tiene todo controlado, las habitaciones del hotel y la zona explorada con los bares y restaurantes cercanos bien fichados, se nota que va mejorando su francés y se entendió estupendamente con el español de la conserje del hotel.

Como hemos llegado temprano tenemos toda la tarde para turistear por Angers pues la ciudad está clasificada como patrimonio de la Unesco, así que cogemos la furgo y nos vamos al casco histórico para visitar el castillo, la catedral con sus impresionantes torres y el resto de edificios significativos.
Después de nuevo todos a la furgo para desplazarnos hasta el parque del Lago Maine. Sorprendentemente el bar-restaurante del club náutico del lago está cerrado, así que nos tenemos que conformar con disfrutar de la visita acompañada con refrescos de máquina expendedora automática.

Prácticamente sin darnos cuenta se nos hecha encima la hora de cenar y Antonio nos tiene reservada una sorpresa en un excelente restaurante que él dice que nos va a encantar. Como en el lago nos hemos quedado con ganas de cervecita, antes de entrar en el restaurante nos quitamos la sed en un bareto con encanto cercano al restaurante. Se nota que estamos por la zona universitaria y hay mucho ambiente por los bares y terrazas de la zona.
Llega la hora de cenar y nos vamos para el restaurante recomendado por Antonio pero, ¡ah sorpresa¡ lo que según él, al mediodía fue un exquisito menú con una excelente relación calidad precio, por la noche se convirtió en cena a la carta de “ Neouvelle Cuisine Française” que además la regamos con un buen tinto de la zona, vamos todo muy “chic”, tanto, que durante toda la cena el cachondeo fue de órdago, pues a Ramón se lo llevaban los demonios con la recomendación de Antonio ¡mirad que fino nos ha salido el cateto de Graná, dónde se ponga un bocata de chorizo¡. En fin, otra graciosa anécdota para el sumario, pues Ramón no dejó de recordárselo a Antonio cada vez que buscábamos un sitio para comer durante el resto del viaje.

Nos hospedamos en: Hotel Sejours Et Affaires Atrium, 20 Rue De Rennes, Angers, 49000, France; tlef: +33241051500, fax: +33241050202
e-mail: [email protected]