Una bonita etapa en la que alcanzaremos el litoral atlántico, al tiempo que tomaremos contacto con pistas y caminos ya que hasta ahora había predominado el asfalto. A partir de aquí la ruta sigue recorriendo el Alentejo Litoral de Norte a Sur camino del Algarve, siguiendo en lo posible la Ruta Vicentina en sus versiones del "Camino Histórico" y "El Trilho dos Pescadores". Integradas dentro del Parque Natural do Sudoeste Alentejano y Costa Vicentina. El "Camino Histórico", desde Santiago do Cacém hasta el cabo de San Vicente, es un itinerario rural que atraviesa caminos forestales, pueblos y aldeas con siglos de historia, y puede recorrerse a pie o en bicicleta. El "Trilho dos Pescadores" transcurre siempre junto al mar por caminos de acceso a playas y embarcaciones entre Porto Covo y cabo de San Vicente. Es un recorrido principalmente pedestre.

Salimos de Santiago por la rua Primeiro de Dezembro, al final desemboca en una carretera secundaría con carril bici, justo frente a un molino. Cogemos por la derecha y pronto no encontramos por izquierda un desvío hacia las Ruinas Romanas de Miróbriga. Se trata de los restos de un antiguo asentamiento lusitano (alrededor del siglo V a.C.), pero los restos actuales están datados de la época romana (entre los siglos I y IV d.C.). El conjunto reúne restos del foro o mercado central, algunas casas de comerciantes y artesanos, casas de hospedaje con restos de pinturas, y unas importantes termas, excelentemente conservadas, que se encuentran divididas en dos conjuntos, uno más suntuoso, con restos de mosaicos, mármol y columnas labradas, y otro mucho más pequeño y humilde.

Tras la visita a las ruinas retornamos a la carretera del carril bici y, en unos 800 m, conectamos con la N261 que la cogemos por la izquierda, para abandonarla poco después por una pista a la derecha. En 1,5 km alcanzamos Aldeia dos Chaos. Cruzamos la localidad y seguimos el camino por una pista que cruza la N120. A partir de aquí Ignoramos el track del Camino Primitivo y optamos por la comodidad de la N120 durante los siguientes 11 km, hasta encontrarnos por la izquierda el cruce a Moinhos do Paneiro, donde abandonamos el asfalto y continuamos por pista siguiendo el trazado del Camino Primitivo.

Por pistas y caminos agrícolas en unos 6 km atravesamos la aldea Vale das Éguas y salimos por carretera en dirección Areal y Sonega. Pronto abandonamos el asfalto y cogemos por la izquierda la pista que señaliza el camino que nos lleva hacia la Albufeira da Barragem de Campilhas. En poco más de 3 km conectamos con la N390 que, por derecha, nos lleva a hasta la presa de embalse de Campilhas. Al final de la presa abandonamos el asfalto y seguimos de frente por la pista siguiendo el trazado del Camino otros 7 km hasta la localidad de Cercal.

Tras realizar parada de avituallamiento en Cercal, nuestra ruta se orienta hacia el oeste buscando la costa. tenemos unos 13 km de asfalto durante los que salvamos una pequeña sierra, para después enfocar recto hasta la entrada de Vila Nova de Milfontes. En la entrada del pueblo ignoramos la carretera que nos llevará a cruzar el puente sobre el río Mira y seguimos de frente para rendir visita al pueblo y el cabo de Vila Nova de Milfontes. Este bonito pueblo vacacional se encuentra justo en la desembocadura del río Mira con grandes extensiones de arena.

En un recorrido de ida y vuelta atravesaremos el pueblo hasta llegar al fondo de saco donde se encuentra la escultura del Arcanjo, justo delante de la unión del río con el Atlántico, donde disponemos de estupendas panorámicas. En la travesía de regreso pasamos junto al Fuerte de São Clemente. A la salida del pueblo nos vemos obligados a coger la N393 por la derecha para cruzar el puente sobre el Mira para seguir la etapa. La travesía del largo y elevado puente nos obsequia unas estupendas vistas del río, el pueblo y la desembocadura. Después del puente tenemos algo más de 5 km por la N393 hasta encontrarnos por la derecha una pista que en 3 km nos lleva a Longueira. Atravesamos el pueblo y desembocamos en una carretera secundaria que en 1,5 km nos acerca a Almograve. Desde aquí tenemos 7 km por pista asfaltada hasta Cavaleiro y 1 km después nuestro próximo destino, Cabo Sardäo y su faro. Las panorámicas de sus impresionantes acantilados nos permiten observar la ancestral lucha entre los roquedos oscuros y el mar, un espectáculo bravío y embriagador.

A continuación, el camino continúa pegado a la costa sobre los acantilados. Entre Cabo Sardão y Porto das Barcas, tenemos un tramo de pista y camino de unos 5 km, salpicado de ensenadas, con algunas playas vírgenes al pie de los acantilados, que nos provocan múltiples paradas para disfrutar de las panorámicas de un espacio natural singular. Además, tuvimos la siempre "desagradable sorpresa" de un pinchazo, pero en este caso se trataba de la rueda trasera de la bici electrificada de Martín, cuyo desmontaje y montaje se nos complicó un poco retrasando la hora de llegada al destino. Antes de Porto das Barcas, justo sobre la playa de Tonel, el camino se separa de la costa haciendo una "u" invertida para salvar el barranco donde se ubica el puerto. Tenemos 1 km de pista alejándonos de la costa hasta alcanzar un caserío (hotel rural) y conectar con una pista asfaltada (CM1158) que, en 1,6 km nos devuelve a la costa en Porto das Barcas. A partir de aquí quedan menos de 3 km por asfalto hasta Zambujeira do Mar. Un pueblo tranquilo, famoso por sus playas agrestes y encantadoras, respaldadas por acantilados abruptos. El pueblo ebulliciona en el mes de agosto con el multitudinario festival de música conocido como Festa do Sudoeste.
Nos hospedamos en el Hotel Ondazul, 351283961450, aceptable.